“Las Armas Nacionales se han Cubierto de Gloria”.
El pasado 5 de mayo, en el mausoleo del General Ignacio Zaragoza, en la ciudad de Puebla, la Nación mexicana celebró el 160 Aniversario de la Batalla de Puebla, hecho histórico en donde las armas nacionales se cubrieron de gloria.
Durante la ceremonia conmemorativa, la cual fue presidida por el Licenciado Andrés Manuel López Obrador, Presidente de México y Comandante Supremo de las Fuerzas Armadas, los jóvenes soldados del Servicio Militar Nacional, clase 2003, remisos y mujeres voluntarias, rindieron protesta de Bandera, acto en el cual se comprometen a defender a la Nación mexicana representada en el Lábaro Patrio.
Durante el evento, acompañaron al Presidente de la República, el General Luis Cresencio Sandoval González, Secretario de la Defensa Nacional; el Almirante José Rafael Ojeda Durán, Secretario de Marina; el Licenciado Miguel Barbosa Huerta, Gobernador del Estado de Puebla, así como miembros del gabinete legal y representantes de los poderes legislativo y judicial, entre otras autoridades civiles, navales y militares.
La Batalla de Puebla del 5 de mayo de 1862, es uno de los episodios que más nos llena de orgullo nacional, ya que las tropas mexicanas, encabezadas por un General visionario y gran estratega, se enfrentaron al que en ese entonces se consideraba el mejor ejército del mundo, el ejército francés en una violenta batalla a inmediaciones de los fuertes de Loreto y Guadalupe, donde las armas nacionales salieron victoriosas, defendiendo la dignidad y libertad de nuestro territorio.
La victoria del General Ignacio Zaragoza dio un ejemplo al mundo entero, que mostró a las grandes potencias de Europa la fortaleza y decisión mexicana por mantener y conservar su libertad, independencia y soberanía nacional. Estos resultados de la batalla fueron producto de su gran estrategia y determinación, por ello arengó a sus tropas para encender su ánimo con la frase: “vuestros enemigos son los primeros soldados del mundo, pero vosotros sois los primeros hijos de México y os quieren arrebatar vuestra patria”, y más tarde, luego de consolidar la victoria, informaba al Ministro de Guerra y Marina: “Las armas nacionales se han cubierto de gloria”.
Como parte de los festejos del 160 Aniversario de la Batalla de Puebla, se llevó a cabo el tradicional desfile cívico-militar, el cual fue encabezado por el propio Presidente de México quien fue testigo de la marcha de elementos del Ejército, Fuerza Aérea y Armada de México, quienes conformaron la columna de desfile junto a un nutrido grupo de planteles educativos del estado de Puebla, los cuales desfilaron acompañados de carros alegóricos representando pasajes históricos y lo más destacado de la cultura poblana.
Los mejores hijos de la patria
Al hacer uso de la palabra, el presidente de México resaltó el papel que ha tenido Puebla en la historia del país, al recordar las decisiones y luchas que se han emprendido desde ese estado.
A los pies del mausoleo del General Ignacio Zaragoza, el titular del Ejecutivo Federal también destacó el trabajo del presidente Benito Juárez en el rumbo del país, al señalar que fue inquebrantable, honesto, austero y que mostró con hechos ser un hombre de principios y, sobre todo, un patriota.
El Primer Mandatario recordó la dirección de Juárez para la defensa de la patria y el inicio de las hostilidades a nuestro país por parte de Francia: “El Gobierno de Juárez convocó a los ciudadanos a la defensa de México. El primer objetivo militar de las tropas francesas fue la toma de Puebla. A finales de abril de 1862, antes de partir rumbo a esta ciudad de Puebla de los Ángeles, el General Conde de Lorencez, al mando de las tropas invasoras, envió desde Veracruz una carta al ministro de Guerra francés, en la cual sostenía con inocultable soberbia, que era tal la superioridad racial, de organización, de disciplina y moralidad de las tropas francesas sobre las mexicanas que desde ya, y a la cabeza de sus seis mil hombres, se consideraba como el amo de México”.
También destacó el importante liderazgo del Comandante del Ejército de Oriente: “Mientras tanto, aquí en Puebla, el General Ignacio Zaragoza animaba a los mexicanos que se preparaban para defender a nuestro país de los invasores franceses; les decía: tenemos ante nosotros al mejor ejército del mundo, pero vamos a triunfar porque ustedes son los mejores hijos de la patria”.
Recordó el célebre telegrama donde el General Zaragoza le informó al ministro de Guerra de la victoria: “Las armas nacionales se han cubierto de gloria; el enemigo ha hecho esfuerzos supremos por apoderarse del Cerro de Guadalupe, que atacó por el oriente a derecha e izquierda durante tres horas; fue rechazado tres veces en completa dispersión. Calculo la pérdida del enemigo, que llegó hasta los fosos de Guadalupe en su ataque, en 600 a 700 entre muertos y heridos; 400 habremos tenido nosotros. Sírvase usted dar cuenta de este parte al ciudadano Presidente”.
Advirtió que no debemos olvidar que lo sucedió un año después, durante el también célebre sitio de Puebla, que duró 62 días, hasta que la ciudad sucumbió porque había para entonces 28 mil soldados franceses en nuestro territorio, y añadió: “Toda esta resistencia no solo fue heroica, gloriosa, sino también estratégica porque permitió a Juárez ganar tiempo, preparar la retirada hacia el norte para mantener en alto la dignidad de la nuestra República, no sin antes dejar organizada la defensa en todo el país con grupos que empleaban eficaces tácticas guerrilleras y que se convertirían durante todo el tiempo de la invasión en una verdadera pesadilla para el famoso ejército de Napoleón III”.
Aseguró que la salvación de México en este difícil trance, debe atribuirse, más que a ninguna otra circunstancia, al ejemplar proceder del Presidente Benito Juárez, quien además de conducir el movimiento con eficacia política supo mantener inalterables sus firmes principios de lealtad al pueblo y de amor a la patria: “Su voluntad era indomable; la convicción absoluta de que estaba sirviendo al país lo hacían inmune a todos los ataques. Ignoraba el desaliento. Decían sus adversarios que era un General mediocre en el campo de batalla, mal jinete, mal tirador; sin embargo, le reconocían el genio de la adivinación, porque pensaba en todo y lo prevenía todo”.
Concluyó su relato recordando que Benito Juárez García fue el mejor presidente de México: “Era perseverante; siempre mantuvo una inquebrantable fe en la causa que defendía: fue honesto, austero, sobrio, demostró con hechos ser un hombre de principios y, sobre todo, un patriota”.
Puebla, lugar de definiciones
Por su parte, el Gobernador Miguel Barbosa, manifestó que Puebla siempre ha estado de lado de la patria e involucrado en el destino del país, tras resaltar que las y los poblanos son leales y están comprometidos con la lucha encabezada por el presidente Andrés Manuel López Obrador: “no le vamos a fallar”, sostuvo.
Destacó que el titular del Ejecutivo Federal es uno de los “mejores hijos de México”, y señaló que la transformación que este encabeza es impulsada desde Puebla, cuyo destinatario es el pueblo y no las élites como sucedía en el pasado.
Para concluir, subrayó: “Que quede claro, quiénes hemos sido leales a la patria con nuestro pensamiento y quiénes se han puesto al servicio de los intereses que no son del pueblo, los que quieren que el poder sirva a las élites, que la patria siempre esté siendo expoliada por poderosos, por élites, que distan de ser el pueblo de México”.
Escenificación histórica de la Batalla de Puebla
En conmemoración del 160 Aniversario de la Batalla de Puebla, personal del Ejército y Fuerza Aérea Mexicanos realizaron el 6 de mayo del 2022, una representación histórica de referido acontecimiento, ocurrido el 5 de mayo de 1862. Esta escenificación se llevó a cabo en las instalaciones de la 25/a. Zona Militar ubicadas en Puebla, Puebla, con el fin de destacar el patriotismo de los mexicanos que hicieron de este hecho de armas un símbolo de defensa de la soberanía e independencia de nuestra Nación.
Durante la escenificación histórica se tuvo la actuación de 2 mil 200 integrantes del Ejército y Fuerza Aérea Mexicanos, caracterizados con vestuario de aquella época, además se tuvo la participación de 130 caballos; réplicas de artillería; artificios pirotécnicos; todo ello empleado en esta representación.
Durante la escenificación se recordaron los siguientes pasajes históricos:
– Inicio de hostilidades.
– Exhorto del General Zaragoza.
– Despliegue del Cuerpo del Ejército de Oriente.
– Despliegue del Cuerpo Expedicionario Francés.
– La Jactancia.
– La Batalla: Primer ataque francés.
– Segundo ataque francés.
– Tercer ataque francés y contrataque mexicano.
– Acción en el flanco sureste del Fuerte de Guadalupe.
– Acción al sureste del Fuerte de Guadalupe, por el camino de Veracruz
a Puebla.
– Desenlace de la batalla.
Cada uno de estos pasajes fue realizado por mujeres y hombres del Ejército y Fuerza Aérea Mexicanos con apego a los hechos históricos más relevantes del desarrollo de citado acontecimiento, con información recuperada de documentos históricos que se encuentran bajo resguardo de la Dirección General de Archivo e Historia de la Secretaría de la Defensa Nacional; de igual forma, el personal fue personificado acorde al vestuario empleado por las tropas mexicanas y francesas de aquella época.
Las mujeres y hombres del Ejército y Fuerza Aérea Mexicanos representan con orgullo a los héroes que defendieron con su vida la soberanía e independencia de México, promoviendo la historia, los valores, y las virtudes que permitan fomentar el nacionalismo, el respeto a nuestros símbolos patrios y el amor al país.
Recuadro 1
Desfile Cívico-Militar
Como parte de los festejos del 160 Aniversario de la Batalla de Puebla, sucedida el 5 de mayo de 1862, donde las tropas mexicanas enfrentaron al Ejército Francés, se realizó un desfile cívico-militar, donde participaron agrupamientos del Ejército Mexicano, la Armada de México y planteles educativos del estado de Puebla, quienes recorrieron las principales avenidas de la entidad.
El desfile cívico Militar, se realizó en la avenida 5 de Mayo y fue encabezado por el Presidente de México Andrés Manuel López obrador, acompañado por los funcionarios que lo acompañaron en el presídium durante la ceremonia conmemorativa al 160 Aniversario de la batalla de Puebla.
Además de los agrupamientos de tierra, se contó con la participación de diversas escuadrillas de la Fuerza Aérea Mexicana, quienes realizaron diversas pasadas de oriente a occidente y de norte a sur, las cuales dejaron estelas de humo blanco en el cielo poblano para disfrute y asombro de los asistentes al evento y de la población de esa entidad.
Tambien integraron la columna de desfile, los contingentes históricos conformados por los memorables tetelanos, xochiapulcas y xacapoaxtlas, indígenas de la sierra de Puebla que valientemente defendieron el territorio nacional integrados al Ejército de Oriente. De igual forma y para cerrar el desfile, se presentó el agrupamiento de charros, cuya presencia evoca a los memorables chinacos que durante la batalla y previo a ella fueron incansables persecutores de las tropas francesas utilizando las habilidades propias de la charrería, deporte ecuestre que el 1 de diciembre de 2016 fue declarado por la UNESCO patrimonio inmaterial de la humanidad
Esta parada cívico-militar se realizó con el eslogan “Que reviva Puebla” por la defensa actual de la soberanía nacional, para recordar que la Batalla de Puebla de aquella memorable fecha, que se realizó en las elevaciones de los fuertes de Loreto y Guadalupe, pues es un orgullo que merece ser recordado en la memoria de nuestro pueblo, para valorar los esfuerzos que se hicieron por México en su legítima aspiración por ser un país libre y soberano.
Fue el General de Brigada D.E.M., Gerardo Mérida Sánchez, Comandante de la 25/a. Zona Militar y Comandante de la Columna de Desfile, quien solicitó autorización para iniciar el desfile y quien rindió al final del mismo el parte de novedades, informando que desfilaron ante la sociedad poblana: 31 Banderas de guerra nacionales, nueve banderas de guerra extranjeras, 4 mil 160 integrantes de las tres Fuerzas Armadas y de la Guardia Nacional, 54 instituciones educativas, 11 mil 500 niños y adultos de las citadas escuelas, 69 vehículos, nueve aeronaves, 400 caballos, 100 charros y 18 carros alegóricos, concluyendo el desfile sin novedad.
El desfile cívico militar, atiende a la misión del Ejército y Fuerza Aérea Mexicanos de realizar acciones cívicas y obras sociales que tiendan al progreso del país y es una forma en la que las Fuerzas de tierra, mar y aire refrendan su compromiso por preservar la soberanía nacional.
Es por ello que las Fuerzas Armadas mexicanas reafirman su compromiso con México para perpetuar el legado que fue heredado por los héroes nacionales.
Mausoleo del General Ignacio Zaragoza
El mausoleo al General Ignacio Zaragoza es una obra arquitectónica dedicada a la conmemoración de la Batalla de Puebla. Es obra del arquitecto Víctor Manuel Terán Bonilla, quien reutilizó la escultura en bronce del General Ignacio Zaragoza realizada por el escultor Jesús F. Contreras y que originalmente se hallaba en la Plazuela del Calvario de la Ciudad de Puebla. Actualmente se encuentra en la Zona Cívica de los Fuertes de Loreto y Guadalupe en la Ciudad de Puebla de Zaragoza
Historia
La primera piedra de este monumento fue colocada por el gobernador Mucio P. Martínez el 5 de mayo de 1895 en la esquina surponiente de la hoy extinta Plazuela de las Piadosas para marcar el comienzo de la recién trazada carretera a los Fuertes de Loreto y Guadalupe, escenario de la Batalla de Puebla.
La obra escultórica fue realizada por el escultor Jesús F. Contreras y el vaciado en bronce realizado por la Fundición Artística Mexicana de la Ciudad de México. La obra completa fue develada por el presidente de México Porfirio Díaz el 22 de noviembre de 1896.
Se compone de un zócalo de piedra y un pedestal de granito, cuya base es un cuadrado entrecortado por cuatro escalinatas. Sobre el pedestal reposa la estatua que representa al héroe del 5 de mayo en arrogante montura, con la cabeza descubierta, vistiendo el uniforme de su alta jerarquía militar y señalando con el índice de la mano derecha el cerro de Guadalupe.
El Mausoleo
En 1976 se decreta que los restos del General Ignacio Zaragoza, que reposaban en el Panteón de San Fernando de la Ciudad de México sean trasladados a la Ciudad de Puebla, por lo que se proyecta la construcción de un magno mausoleo, obra que queda a cargo del Arquitecto Víctor Manuel Terán Bonilla.
El nuevo mausoleo sustituyó la antigua base de granito de la escultura ecuestre, reemplazándola con un pedestal que eleva la escultura del General Zaragoza a 25 metros de altura. Dicho pedestal se yergue en el vértice de una gran fuente monumental ovalada orientada en el sentido de la Calzada Ignacio Zaragoza que comunica la capital poblana con la autopista México-Puebla.