Celebrando el triunfo de la lucha independentista
El pasado 30 de octubre, se llevó a cabo la representación de la “Batalla del Monte de las Cruces” en el municipio de Ocoyocac, Estado de México; evento de suma importancia para la historia de nuestro país, ya que ésta representa el primer enfrentamiento formal entre los ejércitos insurgente y liberal.
Este acto conmemorativo fue presidido por el General de División D.E.M. Juan Arturo Cordero Gómez, Comandante de la 1/a. Región Militar y la Maestra Marcela Gonzáles Salas, Secretaria de Cultura y Turismo del Estado de México, entre otras autoridades civiles y militares.
CIVILES Y MILITARES REVIVEN LA PRIMERA VICTORIA QUE NOS LLEVÓ A LA LIBERTAD
En el discurso oficial de la conmemoración del 211 Aniversario de la Batalla del Monte de las Cruces, la Maestra Marcela González señaló que “para Gobierno del Estado de México es de suma importancia realizar actividades que sirvan para conmemorar nuestra historia, porque la identidad y el sentido de pertenencia a nuestro país es una prioridad”.
La Secretaria de Cultura y Turismo explicó que el Monte de las Cruces es un camino a las afueras de la Ciudad que a finales del periodo virreinal adoptó este nombre en honor a las cruces colocadas que marcaban el punto donde los viajeros habían perecido, “sin embargo desde el 30 de octubre de 1810, este monumento histórico se transformó en un sinónimo de honor y libertad para los mexicanos”.
Por lo que indicó “es un orgullo para el Gobierno de estado de México haber participado en la puesta en escena de este momento histórico, con un significado en el corazón de las y los mexiquenses”.
La Maestra González recordó que previo a esta lucha, el cura Hidalgo dio el grito de Independencia en Guanajuato y acto seguido “el movimiento independentista creció a pasados agigantados, lo que constituyó la primera llamada de atención para el imperio español, que se desmoronaba y del que era necesario emanciparse para construir nuestro nuevo país.
Y con el fin del detener el avance del ejército insurgente hacia la capital del virreinato, las tropas se posicionaron en un lugar estratégico, el llamado Recodo de la Cola de Pato, mientras los Insurgentes avanzaron desde la Marquesa hasta colocarse al frente del Ejército Realista”.
Una vez frente a frente las tropas enemigas, la batalla del Monte de las Cruces comenzó a las 11:00 am del 30 de Octubre y concluyó ese mismo día a las 5:00 de la tarde. “El triunfo del Ejército Insurgente ese día, es uno de los capítulos más gloriosos de la guerra de independencia, que permitió que se formará lo que algún día sería la emancipación y libertad de la nueva España, señaló la Secretaria de Cultura y Turismo del Estado de México.
Posteriormente destacó el enorme esfuerzo por parte de la compañía de actores, quienes escenificaron este acontecimiento histórico con un altísimo grado de realismo, también reconoció la colaboración del Ejército Mexicano en esta celebración: “es importante reconocer la invaluable colaboración institucional con el personal del Ejército Mexicano, tan sólida pero sobre todo, tan cálida y tan personal; no hubo barreras, no hubo los militares y los civiles, no éramos unos y otros, éramos todos celebrando una gran conmemoración, todas y todos los mexicanos de la mano, se sintió una colaboración entre amigos, caminando de la mano hacia el horizonte que se llama México”.
Finalmente reconoció la labor del investigador Rodrigo Sánchez, cuyo trabajo sobre este hecho histórico representó el pilar para esta puesta en escena, también se destacó la labor de las heroínas anónimas que no fueron reconocidas por la historia, pero cuyo esfuerzo también hizo posible la Patria que hoy conocemos.
Posteriormente 405 actores, entre ellos 380 militares que colaboraron desde abril hasta el 29 de octubre de 2021, realizaron la representación de la Batalla del Monte de las Cruces, luciendo caracterizaciones de espectacular calidad, acompañadas de una profunda interpretación que apoyada por los caballos y armas de utilería del Ejército Mexicano, lograron escenificar una obra emocionante, cuyo objetivo final fue hacer vivir en carne propia los hechos ocurridos en aquel Monte de las Cruces, al público presente.
RESUMEN HISTÓRICO DE LA BATALLA DEL MONTE DE LAS CRUCES
Después de iniciada la Guerra de Independencia en Dolores, Guanajuato, el 16 de septiembre de 1810, el Ejército Insurgente se dirigió a San Miguel el Grande (Hoy de Allende), Celaya, Salamanca, Irapuato, Guanajuato y Valladolid (hoy Morelia), en esta última ciudad el 19 de septiembre de 1810, Hidalgo publicó el primer decreto de abolición de la esclavitud; de ahí las tropas rebeldes se encaminaron hacia la capital del virreinato.
Procedente de Maravatío, Miguel Hidalgo y su ejército entraron en territorio del actual Estado de México, por San Felipe del Obraje (hoy del Progreso) y el 27 de octubre llegaron a Ixtlahuaca. Ante esto el Virrey Francisco Javier Venegas ordenó el desplazamiento del realista Torcuato Trujillo hacia Toluca, con unos 2 mil hombres de infantería, artillería y dragones para detener el avance insurgente. El 28 de octubre los insurgentes pernoctaron en Toluca.
El 29 de octubre el cura de Lerma alertó a Trujillo que los insurgentes podían continuar su camino por el puente de Atenco, por lo que el realista designó un contingente reforzado con elementos que el subdelegado de Tianguistenco proporcionó para defender ese punto e impedir el paso de las tropas libertarias. A pesar de su esfuerzo, los realistas fueron embestidos y se vieron obligados a retroceder hasta el Monte de las Cruces, desde donde Trujillo preparó la defensa de la Ciudad de México.
Las fuerzas totales de los realistas se componían de 2 mil infantes, 400 efectivos de caballería y dos piezas de artillera, incluidos 380 soldados de refuerzo. Por su parte, los insurgentes eran, más de 80 mil, de los cuales solo unos 2 mil eran soldados con regular preparación y armamento. La mañana del 30 de octubre de 1810 inicio el enfrentamiento. Al principio los insurgentes fueron blanco fácil de los tiradores realistas, que estaban mejor ubicados; no obstante, los independentistas acometieron con gran valor la artillería enemiga para apoderarse de ella.
Al percatarse de los estragos que estaban sufriendo sus filas, el bando insurgente determinó flanquear a los realistas hasta quedar encima de ellos; cuando lo consiguieron las fuerzas de Trujillo comenzaron a desfallecer hasta que se vieron obligados a tocar retirada.
En su huida precipitada los realistas dejaron abandonados sus cañones, el parque y a heridos que no pudieron auxiliar a la altura de Cuajimalpa, la mayoría de los soldados abandonaron a Trujillo y se desperdigaron en diferentes direcciones quedándose apenas con alrededor de 50 oficiales.
Caída la tarde, la victoria insurgente se había consumado. En la noche los soldados de Hidalgo sepultaron los cadáveres recargados en el campo de batalla y procedieron a festejar y a participar en una misa por la victoria conseguida.
¿QUÉ OCURRIÓ TRAS LA BATALLA DEL MONTE DE LAS CRUCES?
Terminadas las hostilidades y con la Ciudad de México a su alcance, Hidalgo decidió regresar al Bajío y continuar propagando la rebelión en otras provincias para evitar un derramamiento de sangre innecesario. Esto provocó un distanciamiento con Allende, el cura Hidalgo se dirigió a Querétaro, pasando por Temoaya, Jiquipilco y Nixini, si embargo el 7 de noviembre en Aculco, sus fuerzas se encontraron con las del realista Félix María Calleja. En esa escaramuza los Insurgentes perdieron algunos hombres y pertrechos, aunque Hidalgo logró marchar a Valladolid con una parte de sus tropas, mientras que Allende se dirigió a Guanajuato.