Entrevista con el General de Brigada Ingeniero Constructor D.E.M., Gustavo Ricardo Vallejo Suárez, Comandante del Agrupamiento de Ingenieros de “Santa Lucía”.
La construcción del Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles (AIFA) continúa con su proceso de construcción en el Campo Militar de Santa Lucía, Estado de México, donde fueron inauguradas, el pasado 10 de febrero, las nuevas instalaciones de la Base Aérea Militar No. 1.
Sin embargo, la Base Aérea Militar, es solo una parte de la mega obra que se realiza en ese lugar, por parte del Agrupamiento de Ingenieros de “Santa Lucía”, cuyo comandante es el General de Brigada Ingeniero Constructor D.E.M., Gustavo Ricardo Vallejo Suárez; quien es un militar profesional acostumbrado al trabajo y a cumplir en tiempo y forma con las órdenes que le han sido dadas, siempre con el uso óptimo de los recursos que le son asignados, gracias a la disciplina y valores aprendidos durante su formación en la Escuela Militar de Ingenieros, por ello, el pasado 19 de febrero recibió la Condecoración al Mérito Militar.
El Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles será, junto al Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México y el Aeropuerto Internacional de Toluca, parte del Sistema Aeroportuario Metropolitano que es una red aeroportuaria integral de la zona metropolitana del Valle de México.
En ese mismo Campo Militar, se encontrarán conviviendo de manera armónica el Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles, la Base Aérea Militar No. 1, y la nueva Ciudad Militar, que congrega todas las instalaciones militares que fueron reubicadas, pero ahora con diseños y tecnología renovada; todo ello es lo que el Agrupamiento de Ingenieros “Santa Lucía” están construyendo en tiempo récord y con las mejores prácticas y especificaciones de la construcción.
Para hablarnos de todo eso y un poco más, conversamos en una entrevista exclusiva para la Revista Militar Armas, con el General Vallejo Suárez, quien es un militar convencido de que lo que lo impulsa cada día como militar y como ingeniero es el profundo amor que siente por México y el deseo de servir a su gente.
Larga trayectoria de Ingeniero
El General Vallejo Suárez ingresó como cadete a la Escuela Militar de Ingenieros el 1 de septiembre de 1984, por lo que hasta la fecha ha computado 36 años de servicio ininterrumpido, tiempo en el que ha ocupado diversos cargos y ha ido escalando las diversas jerarquías hasta llegar a la que ahora ostenta.
En todo ese tiempo ha tenido una excelente preparación académica, tanto en las áreas de ingeniería como en las ciencias militares, prueba de ello es que realizó el Curso de Mando y Estado Mayor en la Escuela Superior de Guerra y tiene dos maestrías: una en el Centro de Estudios Superiores Navales y otra en una universidad particular.
En la parte de ingeniería, ha construido de todo a lo largo y ancho de la República, como ayudante y como titular de obra, tal es el caso de la obra que realizó antes del AIFA, ya que fue el ingeniero residente durante la construcción de las nuevas instalaciones de la Escuela Militar de Ingenieros, al tiempo que se desempeñaba como Director del mismo plantel, lo que demuestra que es un hombre que está acostumbrado a vencer retos y entregar resultados.
Designación presidencial para la construcción de la obra
Durante la entrevista, el General Vallejo Suárez, recordó cuando se le ordenó la construcción del AIFA: “Tan pronto inició la presente Administración, me mandó llamar mi General Secretario de la Defensa Nacional, para invitarme a participar en este gran proyecto. Me dio la orden de reunir al mejor equipo de ingenieros militares para este propósito, así como el mejor equipo, recursos técnicos, humanos y materiales para cumplir con esta gran misión.
Posteriormente me presentaron con el Presidente de la República, de quien recibí una instrucción muy puntual: construir un aeropuerto austero, funcional, en el menor tiempo posible, a bajo costo, y que sea orgullo de los mexicanos; y en ese compromiso es en el que nos encontramos actualmente”.
Subrayó el porqué el Presidente confía en las capacidades del personal militar: “El Señor Presidente confía en la Secretaría de la Defensa Nacional, en las capacidades que tienen las Fuerzas Armadas para poder cumplir con cualquier tipo de misión.
Somos un Ejército polivalente, ya que la cuarta misión de nuestra Ley Orgánica señala: Realizar obras sociales que tiendan al progreso del país. Además, la Ley faculta a la Secretaría de la Defensa Nacional para hacer obras por administración directa, es decir que las podemos hacer con nuestros propios recursos técnicos, humanos y materiales, de hecho, somos la única dependencia que lo puede hacer, por eso decimos que la Dirección General de Ingenieros de la Secretaría de la Defensa Nacional es la gran constructora del Estado Mexicano, porque construimos rápido, a bajo costo, sin utilidades y con indirectos muy bajos.
Esta capacidad de construcción ha estado de manifiesto durante muchos años porque hemos cumplido con innumerables obras, además de las inherentes a las Fuerzas Armadas, lo que nos ha dado una gran experiencia para estar aquí, incluyendo en el campo aeronáutico, porque todas las bases aéreas han sido construidas por nosotros”.
Participación en las obras de infraestructura prioritaria
Respecto a las obras de infraestructura prioritaria, el General Vallejo Suárez, señaló en las que van a participar los ingenieros militares: “Independientemente de construir este complejo aeroportuario que se realiza con las mejores prácticas internacionales, hay que reubicar las instalaciones militares para dejar libre el espacio para el campo aéreo, lo que implica construir más de medio millón de metros cuadrados de nuevas instalaciones para el Ejército y Fuerza Aérea Mexicanos en un tiempo récord.
Adicionalmente se requiere, como en todo aeropuerto, terreno adicional para el futuro crecimiento, a fin de que tenga un horizonte de desarrollo a 30, 40 y 50 años, por ello fue necesario comprar otras mil 400 hectáreas de terreno, lo que implica reubicar más de 30 kilómetros de vías férreas, lo que nos da la experiencia para poder participar, por mandato del señor Presidente de la República, en el proyecto de construcción del Tren Maya, donde inicialmente la Secretaría de la Defensa Nacional tiene la designación de dos tramos (el seis y siete), los más complejos para su construcción, ya que cruzan la zona selvática.
Con base en toda esa experiencia, el Presidente de la República nos ha instruido para que construyamos un aeropuerto en la península de Yucatán, específicamente en Tulum, que será un aeropuerto internacional, que potenciará el desarrollo turístico de toda la zona de la Riviera Maya, pero también con una perspectiva estratégica, ya que tiene que ser un aeropuerto que soporte los embates de los huracanes, a fin de poder dar o recibir ayuda humanitaria desde este punto o para inhibir el tráfico de aeronaves ilícitas.
Adicional a ello, el Presidente de la República ha instruido para que la Secretaría de la Defensa Nacional, a través de la Dirección General de Ingenieros, que es nuestro órgano rector, materializar la construcción de todos los cuarteles para el despliegue de la Guardia Nacional, además de participar en la construcción de un gran número de sucursales bancarias para el Banco del Bienestar; y en la construcción de canales hidráulicos en el occidente del país”. Al respecto, aseguró que “donde quiera que llamen a las Fuerzas Armadas ahí estarán, hasta donde el país lo requiera y donde la Ley lo permita”.
Gran capacidad de los Ingenieros Militares Respecto a las capacidades que han mostrado los ingenieros militares para construir y vencer todo obstáculo, a fin de cumplir con las tareas que se les designan, el General Vallejo Suárez, aseguró que siempre ha creído que esa capacidad se da porque todos vienen de un mismo plantel, lo que los convierte en un cuerpo monolítico: “La Escuela Militar de Ingenieros, donde se forman los ingenieros militares en diversas ramas del conocimiento y que hoy en día están trabajando aquí, es un plantel donde se forma al personal bajo tres ejes: profesional, axiológico y castrense.
Todo eso homologado durante seis años de carrera, hace un cuerpo de profesionales con unidad de doctrina y pensamiento, un gran espíritu de cuerpo y una voluntad de vencer, propia de la carrera de las armas, además de los valores militares y ser un cuerpo altamente motivado, no obstante nuestro campo de acción sea siempre la adversidad o que hagamos las obras que nadie quiere hacer”.
Pero en el plano personal, el General Vallejo Suárez, señaló aquello que los mueve a pesar del cansancio: “Desde que inició el proyecto, no hemos tenido un solo día de descanso, pero ese es nuestro trabajo, porque esta es la gran misión que tenemos y para cumplir nos mueve el gran amor por México, la idea de servir al país y la satisfacción del deber cumplido, que en este caso, es entregarle al pueblo de México un aeropuerto moderno y funcional, para después regresar sanos y salvos a nuestros hogares después de un despliegue de dos años o tres sin ver a nuestras familias”.
Un aeropuerto de clase mundial
Para hablarnos de las características del nuevo aeropuerto, el General Vallejo Suárez comenzó por señalar por qué era conveniente cambiar el proyecto de Texcoco a Santa Lucía: “Santa Lucía tiene muchísimas ventajas técnico-estratégicas sobre Texcoco: el terreno era de extremadamente baja capacidad de carga, un nivel freático, casi al nivel del terreno; construir allá significaba inhibir el AICM y la Base Aérea Militar de Santa Lucía; así como grande costos de construcción; además, de ser un proyecto superfluo, sobredimensionado y estructuralmente resuelto con claros gigantes de formas orgánicas, que requerían aceros especiales traídos del extranjero, lo cual implicaba una cantidad enorme de cristales, todos cortados de manera independiente, lo cual encarecía brutalmente el proyecto; mismo que iba a requerir un gran mantenimiento porque estaría en un terreno con hundimientos en las pistas que iban a ser de asfalto.
Aseguró que el concepto de gran hub, donde se concentran las grandes aeronaves, ya no es un requerimiento actual, ya que la aviación ha cambiado, por lo que ahora no se requieren de grandes aeropuertos sino de medianos aeropuertos, pero con características de clase mundial, como es el caso de Santa Lucía.
Explicó el nivel de tecnología para la navegación aérea con que contará el AIFA a fin de garantizar las operaciones: “no hay ni punto de comparación de la tecnología con que cuenta el AICM con el AIFA, ya que las pistas contarán con Sistemas de Aterrizaje por Instrumentos ILS (Instrument Landing System) que permitirán realizar operaciones en condiciones adversas de visibilidad en los cuatro umbrales de las 2 pistas destinadas para uso civil; contará con un radar de movimiento de Superficie SMR (Surface Movement Radar) para detectar aviones y vehículos en la superficie de un aeropuerto para que una vez que aterricen las aeronaves sean conducidas hasta el punto de contacto de descenso de los pasajeros con seguridad en caso de presencia de neblina; radar primario y secundario, sistemas de comunicaciones de última generación y sistema de alerta de cizalladura, entre otras innovaciones tecnológica.
Por ejemplo, el tráfico aéreo del AICM no se detuvo para el evento del 10 de febrero, porque la operación de las aeronaves se realizó desde la torre de control del futuro AIFA, con expertos controladores de vuelo. Esa es la primera muestra de que las operaciones aéreas de ambos aeropuertos son compatibles y la mayor muestra se dará el 21 de marzo de 2022”.
Todo el equipamiento de la torre de control es el más moderno, para que tengamos los mejores medios de seguridad, y con ello contemos con un aeropuerto extremadamente seguro. Si a todo eso le sumamos pistas de mayor longitud, rodajes dobles, sistemas de seguridad de todas las instalaciones aeroportuarias, sistemas de análisis de vehículos terrestres, el centro de comando del aeropuerto y su propia planta de cogeneración de energía, en lo que somos los primeros; todo ello lo hace el aeropuerto más seguro y el más moderno de nuestro país, que nos dará un certificado de calidad internacional”.
Aseguró que, dado este nivel de tecnología, todas las aerolíneas, tanto de carga como de pasajeros, tienen la intención de operar desde el AIFA, incluyendo las internacionales.
Respecto al impacto económico que se ha generado con esta mega obra, precisó que se han generado a la fecha 78,283 empleos civiles, de los cuales 36,580 siguen activos, además de contar en sitio con un efectivo de 1,283 militares; con lo que se han generado 320 mil empleos indirectos de la industria de la construcción.
Subrayó que el 21 de marzo de 2022, cuando se inaugure el AIFA, entregarán las instalaciones del aeropuerto terminadas, en funcionamiento y con precios más competitivos, para que los mexicanos que no vuelan normalmente en avión lo puedan hacer.
Finalmente, compartió el significado del exhorto del Agrupamiento de Ingenieros de Santa Lucía, “Cumpliremos la Misión”: “Siempre nos han formado para que no demos un no como respuesta, porque la misión se debe cumplir a cabalidad, en este caso significa que debemos de cumplir con la fecha y especificaciones que se nos dieron para la construcción del aeropuerto. Yo le comento a mi gente que el Plan A dice que no existe un Plan B, hay que hacerlo a tiempo y hay que hacerlo bien.
En el día a día de nuestro trabajo, hemos entendido que el ánimo, el coraje y la fortaleza del Ejército Mexicano y Fuerza Aérea Mexicanos, se nutre de la confianza que le da el pueblo de México a la institución, ese es el mayor motivante que tenemos.
Por último, quiero decirle al pueblo de México que no les vamos a fallar, estamos cuidando sus recursos, en este gran proyecto que será orgullo de los mexicanos, porque es un proyecto de Estado que será un digno portal de nuestro país hacia el mundo”, concluyó.