Avances en una de las obras más emblemáticas del Gobierno Federal.
El Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles (AIFA), el cual estará ubicado en Santa Lucía, Estado de México, es una de las obras de infraestructura más emblemáticas del Gobierno Federal, el cual inició su construcción el 17 de octubre de 2019, fecha en la que el General de Brigada Ingeniero Constructor D.E.M., Gustavo Ricardo Vallejo Suárez, Comandante del Agrupamiento de Ingenieros “Santa Lucía”, se comprometió con el Presidente de México, a entregar, en tiempo y forma, una obra de clase mundial, con la mejor tecnología y con los mejores costos.
En esa fecha, el Agrupamiento de Ingenieros iniciaban una obra que, a la fecha, lleva un avance sorprendente, ya que no solo están a cargo de la construcción del aeropuerto, sino que también son los encargados de reubicar las instalaciones militares.
La tarea resulta por demás desafiante, sin embargo, el General Vallejo Suárez, está acostumbrado a enfrentar los retos, solo hay que recordar que es el mismo General que en tiempo record, construyó la Escuela Militar de Ingenieros, uno de los más modernos y con los mayores adelantos tecnológicos del Sistema Educativo Militar, al tiempo que también atendía sus deberes como Director del mismo plantel.
De esta forma, se ve más cercana la obra que de acuerdo a las instrucciones del Presidente de la República, será inaugurada el 21 de marzo de 2022, sin embargo, el mismo mandatario ha adelantado que la Base Aérea Militar No. 1 será inaugurada en Febrero, Mes de la Lealtad, en 2021.
La importancia de estas instalaciones, radica en que será parte del sistema aeroportuario metropolitano, funcionando con el Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México y con el Aeropuerto Internacional de Toluca, con lo que crecerá de manera ordenada la capacidad de pasajeros a los que se les podrá dar servicio.
Es un proyecto que, desde el inicio, quedó establecido que sería la Secretaría de la Defensa Nacional la administradora y ejecutora directa de una obra de ingeniería militar, cuyo diseño y planeación se apegan a lo estipulado por la Organización de Aviación Civil Internacional y las leyes aeronáuticas.
El presupuesto para esta magna obra es de 74 mil millones de pesos, sin embargo, debido a el manejo eficiente de los recursos económicos que se han hecho hasta ahora, se podrá construir algunas otras obras como el Museo del Mamut, por mencionar solo una, ya que durante los trabajos de preparación del terreno se descubrió una cantidad importante de restos óseos de esta mega fauna, mismos que formarán parte de un espacio cultural junto con el Museo de Aviación Militar.
Alcances generales del proyecto
La Base Aérea de Santa Lucía contaba con un área de 2 mil 300 hectáreas, por ello, como una estrategia de preservación de los espacios y amortiguamiento acústico, el Gobierno Federal realizó la adquisición de mil 400 hectáreas adicionales para que el complejo completo del AIFA tenga una extensión de 3 mil 700 hectáreas. Para hacer un comparativo, solo hay que recordar que el Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México cuenta con poco más de 700 hectáreas.
Al centro de la construcción se encuentran las dos alas del AIFA, donde quedará ubicada la terminal intermodal de transporte terrestre y Plaza Mexicana, que es un núcleo donde llegarán los autobuses foráneos, el tren suburbano, dos líneas de Mexibus, el área de llegada de pasajeros en vehículos de pasajeros, y servicios de como taxis y transporte externos al aeropuerto. Todo ello va a confluir en este punto que será una zona neurálgica para el movimiento y transporte de los pasajeros.
Al frente estará la Ciudad Aeroportuaria, que contará con hoteles, restaurantes, centros comerciales, teatros y oficinas, entre otros servicios.
En el lado opuesto a la Ciudad Aeroportuaria se encuentra la torre de control, que contará con tecnología que le permitirá a las aeronaves el despegue y aterrizaje por instrumentos, con condiciones de cero visibilidad. Tendrá una altura de 88 metros, 14 posiciones para controladores de vuelo y cuatro supervisores, para controlar las salidas y llegadas en las pistas civiles y la pista militar. No obstante, la Base Aérea Militar No. 1 tendrán su propia torre de control, pero únicamente para el movimiento en la plataforma de la propia base.
Luego de la torre de control, se ubicará el área de servicios del aeropuerto, que incluye una terminal de carga, que en una primera etapa será de 400 mil toneladas de capacidad de carga anuales, y en un máximo desarrollo, en la tercera etapa de 3 millones de toneladas, lo que aunado a las vías de comunicación que lo rodean permitirá menor tiempo en su traslado. Es en esta zona donde estará ubicado el casco de la hacienda, que será conservado por su valor histórico.
Las pistas estarán separadas una de otra por una distancia de mil 600 metros, lo que permitirá realizar operaciones independientes una de otra, como si fueran aeropuertos diferentes. También contará con calles de rodaje dobles para que en caso de un cambio de dirección del viento el cambio de utilización del sentido de las pistas sea de inmediato y con ello optimizar tiempos.
Cuidad Militar
La orientación de las tres pistas y sus calles de rodaje, sí como las instalaciones del AIFA implicó el desplazamiento de muchas instalaciones militares para su seguridad a la parte este del polígono, con lo que se podrá contar con un campo nuevo y moderno, incluyendo la Base Aérea Militar No. 1, que es la principal base del país, desde la cual salen todos los apoyos durante la aplicación del Plan DN-III-E, con lo que se convertirá en la base aérea más moderna y funcional de Latinoamérica. A todo ello, se le ha denominado la Ciudad Militar.
La Ciudad Militar contará con un campus educativo donde estará un CENDI, primaria y secundaria para los hijos de militares y las familias que viven en zonas aledañas al campo militar.
Se está reubicando también un hospital de segundo nivel de atención médica, la unidad habitacional, dos museos: el del Mamut y el de Aviación Militar, un centro comercial, la Brigada de Fusileros Paracaidistas, la Comandancia de la 37 Zona Militar y dos planteles: la Escuela Militar de Materiales de Guerra y la Escuela Militar de Tropas Especialistas de la Fuerza Aérea; así como la Región Aérea del Centro, un campo de béisbol y diversas áreas deportivas; así como las instalaciones para el Patronato de Asistencia.
Esta es la llamada Ciudad Militar, misma que tiene prioridad en su construcción, ya que serán ocupadas por el personal militar para que desocupen las viejas instalaciones y con ello la obra del AIFA pueda continuar, por lo que en el mes de Febrero se estará inaugurando la Base Aérea Militar No. 1 y en seguida las demás instalaciones.
Avances del primer año
A un año de iniciadas las obras del AIFA, ya se concluyó el colado de concreto hidráulico en la pista militar y se está trabajando en las calles de rodaje; de igual forma, en la pista central, ya se encuentra terminada con concreto hidráulico; asimismo, en la pista norte, ya se terminó la sustitución del terreno y se está trabajando en el mejoramiento inferior y la estructura de pavimentos con concreto magro.
En un año de trabajo, se tiene un avance del 40.01 por ciento de la obra total, donde trabajan 927 militares y se han generado 48 mil 738 empleos, de los cuales hay activos 26 mil 877; de ellos 23 mil 957 son hombres y 2 mil 920 son mujeres.
Del presupuesto de 74 mil millones de pesos asignados para las obras del aeropuerto, se han ejercido 13 mil 600 millones de pesos.
Es así como, a un año de iniciados los trabajos del Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles, simultáneamente con la Ciudad Militar, que implicó la reubicación de todas las instalaciones de las unidades militares del mismo polígono, presenta un avance sorprendente, pues ya se puede percivir lo que el 21 de marzo de 2022 se estará inaugurando, con los mejores materiales y la mejor tecnología, al mejor costo, lo que hará de este nuevo aeropuerto, una obra de infraestructura de clase mundial, hecha orgullosamente por los Ingenieros Militares de la Secretaría de la Defensa Nacional.
Fases de desarrollo en el AIFA
El Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles contempla en su plan maestro tres fases de desarrollo: en la primera etapa, de 2022 a 2032, se tiene consideradas tres pistas de 4 mil 500 metros, dos civiles y una militar. Dentro del marco de funcionamiento del propio aeropuerto, las dos pistas civiles van a operar junto a la terminal de pasajeros, la terminal de combustibles, las áreas de la torre de control y áreas de servicio. Se espera que en esta primera etapa tenga una capacidad de 20 millones de pasajeros, con 5 mil 500 cajones de estacionamiento y 44 posiciones para aeronaves.
Para su segunda etapa, de 2032 a 2042, se espera tener 245 mil 529 operaciones anuales con 43 millones 171 mil pasajeros anuales; un edificio terminal de pasajeros con 36 posiciones de contacto; 32 posiciones remotas o de larga duración; una terminal de carga con capacidad para 1 millón 257 mil toneladas; 5 mil 936 cajones de estacionamiento para usuarios de corta y larga estancia, 532 cajones de estacionamiento para taxis, mil 360 cajones de estacionamiento para empleados, 690 cajones de estacionamiento para vehículos de renta y 2 pistas de aviación civil con una longitud de 4 mil 500 m, y 45 m de ancho.
En una tercera etapa de 2042 a 2052, se construirá una pista adicional al norte del aeropuerto, con lo que se tendrá una capacidad total de 85 millones de pasajeros anuales. Todas sus pistas serán construidas con concreto hidráulico, lo que permitirá que se le dé solo mantenimiento menor en 20 años.