El Milagro de la Vida

Caso de éxito que marca un hito en la medicina moderna gracias a la Terapia de Regeneración Celular a Base de Inductores.

En la Revista Militar Armas, desde hace años seguimos de cerca la carrera profesional de uno de los médicos militares más destacados de México, el Coronel Médico Cirujano Gerardo Martín González López, ya que producto del novedoso tratamiento que aplica a sus pacientes, ha arrancado de las garras de la muerte a muchas personas, que victimas de una enfermedad de las que se conocen como incurables, han encontrado una segunda oportunidad, con la consecuente mejora en su calidad de vida.

El tratamiento de este profesional de la salud, egresado de la Escuela Médico Militar, es la Terapia de Regeneración Celular, a Base de Inductores, la cual fue desarrollada por él mismo con la intención de encontrar una solución a los problemas de salud que presentaban sus pacientes, terapia que con el tiempo, muchas horas de trabajo y años de investigación ha dado resultados.

Recientemente, conocimos uno de sus más sobresalientes casos de éxito, el cual ha marcado un hito en la historia de la medicina, ya que se trata de un bebé que desde sus primeros estudios médicos previos al parto, se le había diagnosticado hidrocefalia y ausencia del cuerpo calloso, lo que le daba pocas expectativas de vida al nacer o graves alteraciones en su salud, lo que cambió drásticamente una vez que su madre se puso en manos del Coronel González López.

La hidrocefalia puede causar daños permanentes en el cerebro y provocar problemas con el desarrollo físico y mental y si este mal congénito se presenta con la ausencia del cuerpo calloso, las posibilidades de una vida saludable o normal son casi nulas, ya que este último padecimiento provoca retraso en el desarrollo motor y del lenguaje o del desarrollo cognitivo, así como una pobre coordinación motora, entre muchas otras consecuencias.

El caso es de especial relevancia, ya que es el primer caso intrauterino que se atiende con la Terapia de Regeneración Celular a Base de Inductores para revertir una enfermedad en una pequeñita que tenia además de la hidrocefalia y ausencia del cuerpo calloso; persistencia del conducto arterioso, comunicación intrauricular, ausencia de lóbulos cerebelosos, ausencia del cuarto ventrículo y muchas otras diasgenecias y agenesias durante su gestación, es decir, un desarrollo defectuoso de partes del cuerpo durante su vida intrauterina.

Es así como la Terapia de Regeneración a Base de Inductores, hizo posible el milagro de la vida, ya que la bebé nació sin todas esas alteraciones, lo que constituye el primer caso en el mundo que está debidamente documentado con los diagnósticos elaborados por perinatólogos, obstetras y especialistas del área con estudios de avanzada en imágenes estructurales y todos los estudios certificados del antes y después ante notario público y con todos los criterios que cumplen con la medicina basada en la evidencia, respaldada por el historial clínico completo, pero sobretodo, por el testimonio de la madre, quien es una mujer que siempre quiso tener a un hijo y ese deseo solo pudo ser cumplido gracias a la Terapia de Regeneración Celular a Base de Inductores; es por ello que conversamos con la Señora Marichel Pérez Meneses madre de la bebé en una entrevista exclusiva para la Revista Militar Armas, como testimonio de la eficacia de este tratamiento desarrollado por este destacado hijo de la Escuela Médico Militar, quien fiel a los anhelos que lo movían durante su formación en este plantel militar, ha perseverado en su trabajo e investigación para poder ofrecer un tratamiento eficaz a sus pacientes y este es el resultado.

Testimonio de una madre agradecida

La Señora Pérez Meneses comenzó por señalar qué la llevó a ponerse en las manos del Coronel González López: “Cuando tenía tres meses de embarazo, durante un ultrasonido, el médico nos dijo que la bebé venía con hidrocefalia, porque para ese momento su cabecita ya medía más de lo que se esperaba en ese mes de gestación, nos dijo que conforme pasaran los meses su cabecita seguiría creciendo hasta que naciera y ya no aguantara. Es por ello que decidimos ponernos en las manos del Doctor Gerardo, aconsejados por familiares que ya habían probado con éxito la Terapia de Regeneración Celular; afortunadamente al mes que empezó a aplicar la Terapia se vieron resultados, porque cuando fuimos a hacer otro ultrasonido el diagnóstico fue mucho mejor, porque el perímetro de la cabecita bajó.

También nos decían que en los estudios no se registraba el cuerpo calloso y que venía con la espalda bífida, que es cuando la médula espinal de un bebé no se desarrolla correctamente, en fin, había varios problemas en su desarrollo; pero después de la terapia, el nacimiento de mi bebé fue muy distinto a lo que nos diagnosticaron durante el embarazo”.

Aunado a ese diagnóstico, los médicos le recomendaban que podía interrumpir el embarazo para que no tuvieramos que sufrir las consecuencias de tener a un bebé enfermo y con probabilidades de morir muy rápido después de nacer: “Esa recomendación es porque su diagnóstico era fatal, ya que aseguraban que la bebé no iba a poder caminar, tendría convulsiones y tendría que ir de cirugía en cirugía; es decir, fue un momento muy difícil para nosotros como familia que sentíamos que el mundo se nos acababa, sobretodo porque este era mi segundo intento por convertirme en madre, ya que mi primer bebé no pudo nacer”.

Aseguró que luego de consultar con el Coronel González López ese panorama negro que le habían presentado cambió por uno de esperanza: “Le llevamos todos los estudios al Doctor Gerardo y nos dio mucha esperanza con el tratamiento y gracias a Dios si se vieron resultados muy pronto después de la aplicación de la terapia, más o menos en un mes ya se había presentado un cambio sorprendente, ya que en el siguiente ultrasonido bajó considerablemente el tamaño de la cabeza de mi bebé; pero también a los seis meses de gestación ya se presentaba el cuerpo calloso, algo que no se veía en los primeros estudios”.

Pero la sorpresa más grande fue al momento del nacimiento, ya que todos los diagnósticos fallaron: “También nos habían dicho que la niña estaba muy chiquita y que iba a nacer con otras malformaciones: su cuello, los ojos, la cabeza; pero se equivocaron porque ahora mi niña está bien. Le hicieron una tomografía y no aparece ni siquiera la hidrocefalia.

Luego de nacida seguimos el tratamiento con el Doctor Gerardo y ahora que ya tiene cuatro meses y me dice el fisioterapeuta que el desarrollo la bebé va acorde a los meses de nacido que tiene porque mueve los bracitos y pies, la ponemos boca abajo y reacciona y mueve su cabecita, en fin, tiene un control normal de sus extremidades y cabeza como se espera de un bebé de su edad, no como nos decían que iba a ser un bebé inmóvil”.

Compartió lo que le expresó el Coronel González López cuando vio a su bebé luego de nacida: “El Doctor Gerardo me dijo que lo que estábamos presenciando era un milagro de Dios y de la ciencia, porque estábamos presenciando algo que no tenía nada que ver con ese diagnóstico que nos habían dicho”.

Expresó su sentir de que nuestro país cuente con un Médico Militar que pone al alcance de todos este tipo de tratamientos: “El Doctor Gerardo es como un ángel, porque lo que hace con la Terapia de Regeneración Celular es increíble. Lo que puedo decir en mi caso particular es que si no hubiéramos acudido a él quien sabe que sería de mi niña, sobretodo por el aspecto del cuerpo calloso, que no hay un tratamiento para ello, pero con la Terapia si hubo una solución, ahora yo veo a mi hija sana, ella emite sonidos, se ríe, en fin es mucho más sana y normal de lo que nos habían dicho”.

Medical technology icon set for health and wellness

Envió un mensaje para que esta terapia se conozca mucho más: “Lo que les puedo decir a toda la gente es que confíen, porque estamos frente a un caso en donde es palpable el resultado y este caso queda como evidencia de que la terapia de Regeneración Celular a Base de Inductores funciona. Desde la primera vez que vimos al Doctor Gerardo sus palabras nos dieron mucha tranquilidad, pero sobretodo esperanza y alivio, porque nos dijo: vamos a intentarlo, y mire aquí estamos con esta preciosa bebé que nos ha dado mucha felicidad”.

Finalmente manifestó su gratitud al Coronel González López: “Lo único que le puedo decir al Doctor Gerardo, es gracias, muchas, muchas gracias, porque si no fuera por él mi hija no estaría aquí, gracias por atenderla y por ese tratamiento que nos ha cambiado la vida, porque gracias a él mi hija ahora se podrá desarrollar de una manera normal.

Es un motivo de orgullo para nuestro país, saber que México cuenta con un Médico Militar que ha desarrollado un tratamiento médico tan avanzado y que éste puede y ha salvado muchas vidas, porque sé que gente de otros países han venido a recibir este tratamiento y nosotros lo tenemos aquí. Pero también es el reflejo de que en los planteles militares tienen un sistema estricto, disciplinado y basado en esos valores que mueven a los integrantes del Ejército a ayudar a los demás por ese amor a la Patria que se les inculca y eso ha hecho que el Doctor tenga ese deseo de ayudar a la gente y eso también contribuye a estos resultados, concluyó”.

De esta forma es como la vida de una familia ha sido cambiada para siempre, ahora una bebé tendrá una vida más sana y una madre podrá abrazar a si hija por muchos años, gracias a la terapia de Regeneración Celular a Base de Inductores, tratamiento desarrollado por un Médico Militar, quien sigue sumando casos de éxito gracias al gran amor que tiene por su país y su gente, por ello el Coronel Gonzáles López es un digno soldado de la Patria.