Entrevista con dos elementos femeninos que están rompiendo estereotipos en el Instituto Armado.

Desde el origen del actual Instituto Armado hasta nuestros días, la mujer militar ha tenido un papel fundamental, sin embargo, fue hasta 2007 que inició la apertura para ingresar a planteles militares en carreras que antes solo eran para hombres, lo que marcó un hito en la vida institucional del Ejército y Fuerza Aérea Mexicanos, ya que desde entonces, miles de mujeres han aprovechado esta oportunidad para sumar sus capacidades y talento en el cumplimiento de las misiones que tienen encomendadas las Fuerzas Armadas.

Para conocer de cerca cómo este parteaguas cambió la vida de dos mujeres, y con motivo del 8 de marzo, Día Internacional de la Mujer, conversamos en una entrevista exclusiva para la Revista Militar Armas, con una Ingeniero Militar, quien se desempeña como diseñadora de sistemas informáticos del Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles y con una Piloto Aviador, quien es Comandante de Aeronave; ambas compartieron su historia para decirle a las mujeres de México que sí se puede, solo es cosa de seguir con pasión y trabajo aquello se quiere.

Comprometida con su profesión

Ella es la Capitán Segundo Ingeniero en Computación e Informática, Karina Islas López, egresada de la Escuela Militar de Ingenieros, quien nos compartió el inicio de su vida militar: “Yo ingresé a las Fuerzas Armadas en 2002, a la Escuela Militar de Enfermeras, ahora Escuela Militar de Enfermería, de donde me gradué satisfactoriamente. A mi egreso de este plantel militar se me asignó al Hospital Central Militar, donde estuve en cuidados coronarios.

Cuando ingresé a las Fuerzas Armadas, la Escuela Militar de Ingenieros sólo era para varones, sin embargo pasado un tiempo se hizo la apertura para personal femenino y ahí vi la oportunidad de ser ingeniero, que era un anhelo que yo tenía desde pequeña, por eso participé en el concurso de selección y afortunadamente fui aceptada en 2011, porque no es por cuota sino por la puntuación que se dan los lugares en el plantel. Es una escuela donde hay más varones que mujeres, sin embargo me adapté bastante bien, porque ahí no se hace diferencia si se es hombre o mujer”.

Aseguró que se graduó de ese plantel como Ingeniero en Computación e Informática, una carrera que tiene poco tiempo, pero que se creó ante la necesidad de innovación tecnológica dentro de las Fuerzas Armadas, y compartió el proyecto en el que participa actualmente: “Me encuentro trabajando en el Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles, donde se formaron grupos interdisciplinarios para que este proyecto tenga éxito, trabajo que nos dará a los ingenieros militares una proyección tanto a nivel nacional como internacional, debido a que es un proyecto complejo que involucra muchos campos de la ingeniería, donde yo formo parte de la mesa de tecnologías haciendo análisis de los sistemas aeroportuarios que serán parte de la operación. Las herramientas para enfrentar este gran compromiso nos las van dando a lo largo de nuestra carrera militar, ahora es solo cosa de implementarlas”.

Señaló cómo ha percibido la equidad de género en el Ejército desde que inició su carrera militar: “Al ingresar al Instituto Armado vi que no hay diferencia entre hombre o mujer, pero depende de cada persona la pasión y vocación con la que haga las cosas, eso es lo que en lo personal me ha dado resultados en esta carrera tan fascinante como lo es la Carrera de las Armas. Por eso, cuando alguien me pregunta que si pudiera regresar el tiempo y escoger nuevamente, yo no dudo en afirmar que otra vez sería militar, porque el Ejército me ha dado todo, tanto en lo económico, como en lo emocional y profesional”.

Afirmó que la Secretaría de la Defensa Nacional ha trabajado mucho para que a las mujeres se les pueda brindar apoyo y dio algunos ejemplos: “Los Centros de Desarrollo Infantil o Cendis, donde se cuida a los hijos de las mujeres militares; existe también el Observatorio para la Igualdad entre Mujeres y Hombres del Ejército y Fuerza Aérea, que es un organismo que no solo procura la protección de la mujer, sino también del hombre; todo eso nos permite avanzar como Secretaría de Estado”.

Destacó que con el tiempo sea darán las condiciones para que de acuerdo a la ley, una mujer ocupe el máximo cargo en esa Dependencia: “En el 2012 se le dio la oportunidad a las mujeres para que ingresaran a las armas y servicios, cuando pudieron ingresar al Heroico Colegio Militar en Artillería y Zapadores y ahora como Policías Militares, incluso una de ellas con el tiempo tendrá la oportunidad de ser Secretaria de la Defensa Nacional, si llegan a Generales de División”.

Para concluir, envió un mensaje a las mujeres de México: “A mis compañeras de armas, lo que les puedo decir es que ingresar al Instituto Armado fue la mejor decisión que pudimos tomar, por ello las invito a que sigamos trabajando por este gran país como siervos de la Nación, por eso hay que abrazar con más fuerza la carrera de las armas.

A las jovencitas que pretenden ingresar, les puedo decir que se animen, que no lo piensen y se sumen a las filas del Ejército, para que se abracen a nosotras como nuestras hermanas pequeñas y que juntas hagamos de este país un lugar mejor”.

Una mujer que soñó con volar

La Teniente de Fuerza Aérea Piloto Aviador Miriam Martínez Magaña ingresó al Colegio del Aire, el 1 de septiembre de 2012, motivada por todo aquello que vio durante un desfile al que asistió cuando era pequeña, donde participaron las aeronaves de la Fuerza Aérea Mexicana, de esta forma inició su sueño por volar: “Desde entonces tuve un gran interés, pero no fue hasta 2007 que ingresaron las mujeres a la Escuela Militar de Aviación, y en 2012 ingresé terminando mi preparatoria. Escogí la carrera de aviación porque siempre he buscado hacer algo diferente, y estar en el Colegio del Aire en una carrera que siempre había estado destinada para hombres para mi fue todo un reto”.

Aseguró que no se le hizo difícil adaptarse a su nueva vida, porque ese era el lugar donde quería estar: “Adaptarme no fue muy complicado, porque durante mucho tiempo eso era lo que yo quería y por eso estaba dispuesta a superar lo que viniera para alcanzar mi sueño de volar muy alto, aunque no puedo decir que no extrañé a mi familia, porque la escuela está en Zapopan y yo soy de Morelia, pero nunca lo vi como un sacrificio, porque estaba donde yo quería estar”.

Señaló lo más gratificante de su estancia en la escuela: “En los cuatro años de mi carrera tuve la oportunidad de ser parte de la escolta de bandera, tuve muchos vuelos en solo y volé tres aviones: el Cessna, Aermacchi y  Pilatus. Los vuelos en solo fueron una de mis grandes satisfacciones, porque en ellos descubrí que tenía la habilidad y la destreza para realizar una operación aérea”.

Compartió lo que hace como piloto militar: “A mi egreso fui asignada a la Base Aérea Militar No. 2, que se encuentra en Ixtepec, Oaxaca y ahí sigo, donde me desempeño como piloto de un T-6 C Texan II. Es una base estratégica de la Fuerza Aérea Mexicana donde realizo operaciones de vigilancia e intercepción, debido a que es una zona vulnerable del país”.

Afirmó que su familia está orgullosas de lo que hace, porque son testigos de todo el esfuerzo que le imprime a la vida para alcanzar las metas que se propone, y compartió como encontrar ese equilibrio entre familia y trabajo, a pesar de ser madre soltera: “El ser madre soltera para mi ha sido una experiencia fuerte, sin embargo he tratado de buscar siempre el equilibrio entre mi hija y mi trabajo. El Instituto Armado me ha dado los medios para que así sea, dándole tiempo de calidad a mi familia y cumpliendo con lo que la Institución espera de mí; en suma, tengo que ser mamá, pero también una piloto de la Fuerza Aérea Mexicana, pero todo se puede, porque la Secretaría de la Defensa Nacional desde hace mucho tiempo ha implementado políticas de igualdad y equidad con el propósito de que, sin importar que seamos padres o madres, todos alcancemos nuestras metas”.

Dio a conocer un ejemplo de esas prestaciones que tienden al apoyo de hombres y mujeres en la Institución: “Los Centros de Desarrollo Infantil son solo una muestra de que la Institución nos procura las condiciones para que estemos tranquilas, porque sabemos que ahí están nuestros hijos, incluso las 24 horas si estamos de servicio, con las mejores condiciones para que tengan un desarrollo adecuado a su edad y necesidades, aunque es pertinente aclarar que este beneficio es también para nuestros compañeros, no solo par mujeres”.

Expresó su opinión respecto de las políticas de equidad de género hacia el interior de la Secretaría de la Defensa Nacional: “Todos los trabajos que se han hecho en la Institución son los adecuados, porque están encaminados a que un día ya no hablemos de equidad o igualdad, porque será algo normal, prueba de ello es que actualmente las oportunidades son a la par, a todos se nos brinda el apoyo por igual, porque todos tenemos que responder ante una misión de la misma manera”.

Para concluir, envió un mensaje a las mujeres del Instituto Armado: “Les diría que se quiten los prejuicios y los estereotipos y sigan avanzando hacia sus metas y sueños dentro de la carrera militar, porque hoy en día dentro de las Fuerzas Armadas se puede llegar hasta donde uno misma quiera llegar”.