90 Años de los Mueros Blancos de San Jerónimo.
La Escuela Superior de Guerra es un establecimiento de educación militar de nivel superior donde se realizan estudios militares de índole profesional para el desarrollo científico, humanístico y tecnológico de las Fuerzas Armadas, cuya misión es formar oficiales de Estado Mayor para desempeñarse como comandantes en los diferentes niveles de mando y como colaboradores y asesores de los mandos de escalones superiores, tanto en tiempo de paz como en tiempo de guerra.
La Escuela Superior de Guerra tiene los siguientes objetivos: formar Oficiales de Estado Mayor, especializar a personal Diplomado de Estado Mayor en actividades militares de carácter conjunto y combinado; capacitar a oficiales egresados de Escuelas Militares de formación para el ejercicio de mando; capacitar a Jefes no Diplomados de Estado Mayor para ejercer el mando de Unidades Tipo Corporación, Dependencia o Instalación; capacitar a Jefes no Diplomados de Estado Mayor para desempeñarse como Segundos Comandantes y Jefes de Grupo de Comando de Unidades de nivel Corporación.
Evolución del plantel
En la Escuela Superior de Guerra, cuyo Director actualmente es el General de Brigada D.E.M., Rubén Zamudio Matías, se imparten diversos cursos de profesionalización: Curso de Mandos y Estado Mayor General, Curso de Mando y Estado Mayor Aéreo, Curso Superior de Guerra, Curso Superior de las Armas y Servicios y el Curso Básico de las Armas y Servicios, los cuales admiten a personal del Ejército, Fuerza Aérea y Armada de México, así como personal extranjero de países amigos.
Fue el 15 de abril de 1932 cuando se creó la Escuela Superior de Guerra en el Pabellón Álvaro Obregón en el Colegio Militar de Popotla, en una ceremonia presidida por el Licenciado Pascual Ortiz Rubio, presidente de la República y el General de División Plutarco Elías Calles, Secretario de Guerra y Marina.
El 17 de julio de 1933 trasladó sus instalaciones a San Jerónimo Lídice, Ciudad de México, adoptando desde entonces el sobrenombre de “Los Muros Blancos de San Jerónimo”.
El primer curso impartido en esta escuela fue el Curso de Estado Mayor con una duración de tres años y en 1933 se graduaron 14 Oficiales de Estado Mayor de Guerra.
En el año de 1982 se llevó a cabo la primera evolución en materia educativa de esta escuela, al reconocerse los cursos como licenciatura y finalmente en 2021 evolucionaron a Maestría en Administración Militar con Especialidad de Estado Mayor.
Presente de la Escuela Superior de Guerra
Para ingresar a la Escuela Superior de Guerra y realizar los estudios de Estado Mayor se requiere cumplir un proceso de selección definido por la Secretaría de la Defensa Nacional. Cuando el discente es aceptado para cursar dicha especialización, deberá completar el plan de estudios de tres años en “los Muros Blancos de San Jerónimo”.
Estudios que al culminar con éxito otorgan el nombramiento como Oficial de Estado Mayor al discente, para servir posteriormente en los Cuarteles Generales, Estados Mayores de las Regiones Militares y Estado Mayor Conjunto de la Secretaría de la Defensa Nacional y en ocasiones particulares desempeñarse en comisiones de estudios nacionales y extranjeros.
Actualmente la Escuela Superior de Guerra alberga a un becario del país hermano de Brasil en los Cursos de Mando, un jefe del Ejército Argentino en el Curso de Estado Mayor General y a un Jefe de la República de Guatemala en la Maestría de Administración Militar.
En esta escuela se brinda profesionalización a los integrantes de las cinco Armas del Ejército Mexicano: Artillería, Ingenieros, Arma Blindada, Caballería e Infantería, ya que su visión prospectiva es: formar un modelo educativo, teórico-práctico, filosófico que permita a los egresados contar con las habilidades y capacidades para seguir colaborando y asesorando al mando, además de servir de una mejor, óptima, profesional y capaz forma, no solo al país, si no a las fuerzas armadas de la Nación.
Mujeres Oficiales de Estado Mayor
Desde el año 2007 la Escuela Superior de Guerra recibió en sus instalaciones a personal femenino para formarse como Oficiales de Estado Mayor, graduándose tres años después dos mujeres Diplomadas de Estado Mayor, que hoy se encuentran colaborando y asesorando de forma inmediata en las diferentes unidades y dependencias del Ejército y Fuerza Aérea Mexicanos.
Esta apertura ha permitido que el día de hoy, doce mujeres militares se encuentren cursando diversos estudios en la Escuela Superior de Guerra. Es así que el nivel de profesionalización del Ejército Mexicano ha evolucionado y la Escuela Superior de Guerra invita a la juventud de oficiales a cursar las diferentes especialidades que brinda este centro educativo, con el mismo objetivo con el cual fue fundada: permitir a los egresados contar con las habilidades y capacidades para colaborar y asesorar al mando, a fin de servir mejor al país, guiados por el exhorto: “Saber más para servir mejor”.
Sus instalaciones
Tras el asta bandera se encuentra el Pabellón Álvaro Obregón, el cual hace un homenaje al personaje que al igual que los Generales Alamillo y Amaro definió el destino militar de las fuerzas armadas y el nuevo ejército de origen revolucionario. Al final lleva a un pasillo donde se encuentran las placas conmemorativas a la inauguración de dicha escuela y algunas promociones entregadas por oficiales graduados que agradecen su estadía en dicho plantel.
A un costado destaca el Parque de la República que alberca diversas bancas de cantera rosa que a su vez exponen los escudos de diversos estados de la República. En la misma plaza se encuentra el “Monumento de las Américas” erigido de 1941 a 1942 por el entonces Director, el Teniente Coronel Ingeniero Industrial D.E.M., Luis Rivas López; en este lugar de descanso y estudio se erigen cuatro vitrales el primero representa el descubrimiento del Lago de Texcoco y el origen del actual Escudo Nacional.
El segundo vitral alude al General de División Gabriel Valencia, quien fuera comandante de División del Norte en la Batalla de Padierna los días 19 y 20 de agosto de 1847. El tercer vitral expone el Escudo de Armas de la Ciudad de México otorgado por el Rey Carlos I de España a Hernán y Cortez; y finalmente, el cuarto vitral representa la Placa del Estado Mayor que debe portar todo Oficial de Estado Mayor egresado de este centro de estudios superiores militares.
La placa tiene como fondo los colores de la bandera nacional, en su centro sobresale un guerrero- águila “Cuautli” que destacaba en los campos de batalla prehispánicos, desprendiéndose del centro las alas que simbolizan la independencia y la rapidez que debe caracterizar al Oficial de Estado Mayor; la antorcha con llamas representa el conocimiento y la sabiduría y por último, se desprenden cinco rayos que representan: el valor, honor, lealtad, patriotismo y abnegación, virtudes que debe reunir el oficial egresado de estas instalaciones.
Otro significado de los rayos son las cinco armas que constituían en 1942 al Ejército Mexicano: Infantería, Caballería, Artillería, Ingenieros y Aeronáutica, ya que para ese año aún no se constituía como fuerza armada la actual Fuerza Aérea Mexicana, siendo considerada en ese tiempo solo como un Arma del Ejército Mexicano.
Al fondo se encuentra el Edificio Académico, lugar donde se imparten los diferentes cursos de la Escuela Superior de Guerra y a un costado se cuenta una alberca semi olímpica, así como canchas deportivas para el esparcimiento de los discentes; instalaciones que son rodeadas por los muros blancos característicos que le dan el sobrenombre de los “Los Muros Blancos de San Jerónimo” a la Escuela Superior de Guerra.